La crisis que sufren ciertos sectores del retail, obliga a estos a refugiarse en nuevos formatos de tiendas.
Los últimos datos que venimos conociendo de la reorientación de ventas de las grandes cadenas de distribución (especialmente del textil) hacia la venta on line, pone en duda la continuidad de la tienda física. Muchas de esas tiendas –y no únicamente las que pertenecen a esos grandes grupos- se están dedicando a poner pantallas digitales en sus establecimientos, aunque no siempre con los resultados previsibles. Un estudio publicado recientemente indica que solo el 20% de esas pantallas están aportando resultados y son rentables para la tienda. Cuando su proveedor, indica que les permitirá
incrementar sus ventas en más de un 20%, lo cierto es que poco más de un incremento del 8%
es el resultado.
Actualmente irrumpen soluciones de Big Data, IoT, IA, etc, etc, … que no son todavía explotadas en estos ámbitos. Mientras que la gran mayoría las utilizan como simples pantallas para mostrar sus productos u ofertas puntuales, pocos consiguen ver que se puede ir mucho más allá.
Y ya no únicamente lo que este tipo de soluciones de marketing dinámico o marketing visual o
más conocido como Digital Signage, ofrece grandes resultados en el sector del retail o en el sector privado, sino que para el mundo público le abre grandes expectativas.
¿O no es uno de los grandes problemas de las administraciones el poder conocer en detalle la
opinión y aportaciones de sus ciudadanos, o incluso de dar a conocer las iniciativas que se llevan a cabo desde los gobiernos, del tipo que este sea?.
Pues bien, la toma de datos, gestionados, analizados y concluyentes, aportan al Digital Designe
un nuevo campo de actuación que los gestores públicos deberán valorar como solución a
mucho de sus problemas.
El poder apoyarse en una empresa que sepa gestionar la toma de datos en un sentido y la presentación de la información por otro, otorgará al sector público una nueva dimensión en las Smart City o ciudades innovadoras. La Buena Ciudad –tal como describo en mi última publicación que pronto estará en las librerías- adquiere una nueva dimensión en cuenta a la participación del ciudadano en la realidad municipal, así como la consideración del ciudadano en la construcción de la ciudad, por parte del gobierno de turno.
Un gran mundo queda por desarrollar, y empresas proveedoras –que escasamente lo ven como venta de pantallas o como soporte de publicidad- y clientes, deberán empezar a conocerlo en profundidad y trabajar en ello.