En octubre del 2015, fui invitado a participar en dos Mesas de Trabajo en el marco del GREENCITIES 2015 en el Centro de Convenciones de Málaga.
Presenté la visión de cómo abordar el desarrollo de la Ciudad Inteligente, no tanto desde la perspectiva de las propuestas tecnológicas, sino del análisis de la realidad urbana.
Una vez me encontré con la mirada enfrentada de los representantes de las tecnológicas, que salvo casos excepcionales, creían ver a un «enemigo», en lugar de a un «aliado».
Dentro de los «aliados», fue de destacar y agradecer la opinión que en una de las mesas emitió Enrique Cortés de IBM, quien destacó la importante relación que habiámos alcanzado las dos empresas trabajando juntas para un importante proyecto en el área metropolitana de MAdrid. Cortés destacó que sin duda IBM es un líder tecnológico, pero que sin el apoyo de un urbanista como ARNAIZ no podría haber comprendido la realidad de la ciudad y no hubiera podido ajustar su oferta a las necesidades y circunstancias del cliente público.